Cuando hablamos de finanzas, es común que surjan términos que quizá no escuchamos a menudo en nuestra vida cotidiana, como es el caso de las obligaciones financieras. Estas son compromisos que adquirimos con terceros y que implican el pago de una cantidad económica en un plazo determinado. Un ejemplo de este tipo de obligaciones es el pago de una hipoteca o el uso de una tarjeta de crédito. Pero, ¿cómo funcionan estas obligaciones? ¿Qué tipos existen? En esta entrada, abordaremos todas estas preguntas para brindar una mejor comprensión acerca de qué son las obligaciones financieras.
¿Cómo se dividen las obligaciones financieras?
Es importante saber que las obligaciones financieras se dividen en dos tipos deudas
Las deudas a corto plazo
Son aquellas que debemos pagar en menos de un año, mientras que las segundas se extienden en un periodo superior al año. Las deudas a corto plazo suelen ser transacciones más pequeñas, como el pago de una tarjeta de crédito o un préstamo personal.
Las deudas a largo plazo
Son aquellas deudas que están relacionadas con compras o inversiones mayores, como la adquisición de una vivienda. Estas obligaciones se refinancian y se pagan en un plazo más largo, lo que permite una mayor flexibilidad en los pagos.
Tipos de obligaciones financieras
Obligaciones garantizadas
Son aquellas que están respaldadas por algún activo, como una vivienda o un automóvil. En caso de que no se pueda cumplir con el pago, el acreedor puede tomar posesión del activo para cubrir la deuda.
Obligaciones no garantizadas
Son aquellas que no están respaldadas por ningún activo y se basan únicamente en la confianza del prestamista hacia el prestatario. En caso de incumplimiento, el acreedor puede tomar medidas legales para recuperar su dinero.
¿Cómo funcionan las obligaciones financieras?
Las obligaciones financieras funcionan mediante
1. Créditos y préstamos: Este tipo de obligaciones se refiere a una cantidad de dinero que se nos presta y que debemos devolver en un plazo determinado, más los intereses que correspondan.
2. Líneas de crédito: En este caso, es una cantidad de dinero que se nos pone a disposición para utilizarla en el momento que lo necesitemos. Sin embargo, debemos devolver lo que hemos utilizado en un plazo determinado, más los intereses correspondientes.
3. Bonos y letras: Son títulos de deuda emitidos por empresas o instituciones gubernamentales para financiar sus operaciones. Quienes los adquieren reciben un pago de intereses periódicos y el compromiso de recibir el valor nominal que se establece en un plazo determinado.
La finalidad de las obligaciones financieras
Es obtener el financiamiento necesario para llevar a cabo ciertas actividades o adquirir bienes que no podemos adquirir con nuestros recursos financieros. Así, estas obligaciones son una herramienta financiera muy útil tanto para empresas como para particulares. Sin embargo, es importante tener en cuenta que también conllevan un riesgo, ya que en caso de incumplimiento pueden generar problemas económicos y legales.
Importancia del cumplimiento de las obligaciones financiera
El cumplimiento de las obligaciones financieras es fundamental para mantener una buena reputación crediticia. Si se adquieren compromisos financieros y no se cumplen, esto puede afectar negativamente la capacidad de obtener futuros préstamos o líneas de crédito. Además, el incumplimiento también puede generar cargos adicionales por intereses moratorios y dañar las relaciones comerciales.
¿Cómo gestionar adecuadamente tus obligaciones financieras?
Para gestionar adecuadamente las obligaciones financieras, es importante tener un plan de pagos y un presupuesto que incluya los pagos correspondientes. También es recomendable tener una reserva de emergencia en caso de imprevistos o dificultades para cumplir con los pagos. Es fundamental ser conscientes de nuestros límites financieros y no adquirir compromisos que no podamos cumplir. Si se presentan dificultades para cumplir con las obligaciones, es importante comunicarse con los acreedores y buscar soluciones alternativas antes de llegar al incumplimiento.
Conclusión
Las obligaciones financieras son compromisos que adquirimos con terceros y que implican el pago de una cantidad económica en un plazo determinado. Existen distintos tipos de obligaciones financieras, tales como créditos y préstamos, líneas de crédito, bonos y letras. A su vez, estas pueden ser garantizadas, no garantizadas o convertibles. Es importante conocer a fondo estos conceptos para tomar decisiones adecuadas en nuestra vida financiera. Por ello, esperamos que esta entrada haya sido útil y haber despejado algunas dudas acerca de estas importantes herramientas financieras.